Por esa hermosa resaca.

Entre risas y alcohol. 

Entre besos y abrazos.

Entre tu voz y tu cuerpo.

Entre los bailes, la música alta. Los latidos del corazón, al ritmo de las canciones. 

Entre copas, mareos, y sonrisas. 

Por esos días en los que no llegas a estar fresca. Esos días en los que pasa de todo, y de nada. Esos días en los que parece que tu cuerpo va levitando.

Por esos encuentros, bonitos o amargos. Por esos instantes. Y también por esos dolores de cabeza, esa garganta seca. O por el estómago revuelto.

Porque todo forma parte del conjunto.

Porque aunque tanta gente se dedique a criticarlo, a mi me encanta la sensación de libertad que me provoca. Poder olvidarme de los complejos, de las críticas, y divertirme sin pensar en lo que los demás digan. 

A si que llamadme borracha si queréis, pero a mi... ¡Que no me quiten "lo bailao"!